Algunas de mis canciones, bastantes ya, han tenido que experimentar cómo su mensaje se desmoronaba a medida que su autor, o sea yo, iba tomando conciencia de la verdadera realidad del asunto sobre el que pretendían arrojar luz. Estamos viviendo una transformación tan profunda que este hecho se hace patente en tantos aspectos de mi realidad como compositor de canciones y transmisor de contenidos que, debido a la responsabilidad que esto implica, considero que es el momento de hacer un alto en el camino para llevar a cabo un proceso de transformación profunda y reflexionar para volver a estar en disposición de poder ofrecer lo mejor de mí en mi vida cotidiana y, por tanto, en mis conciertos. Por ello es que, en lo que va de año, no he hecho todavía ninguna presentación, ni MicroDespierto, y dudo que lo haga hasta pasados unos cuantos meses, enfrascado como estoy en la autoobservación, la remasterización de Vida y en la confección de este portal desde el que me dispongo a proyectarme hacia el exterior. Por supuesto, sigo a disposición de quien me precise para hacer un concierto, para lo cual se me puede contactar a través de este medio. ​ ​​ ¡El silencio merecerá la alegría! ¡Seguro! ​ Un abrazo y hasta pronto. ​ David Enríquez Trovador​ ​ Madrid, 18/06/2025